¡IMPULSAR LA LUCHA REVOLUCIONARIA CONTRA LOS PREPARATIVOS DE GUERRA MUNDIAL IMPERIALISTA!
Todos los países imperialistas se proclaman defensores de la libertad, la democracia y la paz mundial. Todos pretextan luchar contra las dictaduras y el terrorismo internacional. Pero en realidad son ellos los peores terroristas dictadores en el mundo. Hablan de paz pero se preparan febrilmente para una nueva guerra de rapiña mundial. Fortalecen la industria armamentista. Agigantan sus arsenales. Movilizan descomunales máquinas de guerra principalmente hacia el Este de Europa. Patrocinan las ya prolongadas guerras contra los pueblos de Palestina, Siria, Yemen. Incitan al estallido de nuevas guerras reaccionarias en el estrecho de Taiwan, en la península de Corea, en el Mar de la China oriental, en la frontera de Ucrania con Bielorrusia, en la frontera marítima entre Grecia y Turquía. La OTAN comandada por el imperialismo yanqui, en Ucrania a través del régimen títere de Kiev enfrenta sus ejércitos mercenarios, armamentos y jefes militares, al poderío militar del imperialismo ruso. De lado y lado urden pretextos para usar armas nucleares. Las contradicciones inter-imperialistas se han ido exacerbando hasta un punto, donde una nueva guerra mundial con armas nucleares, ya no solo es un peligro imperialista latente, sino un peligro inminente para la existencia de la sociedad mundial y de su hábitat.
Básicamente, las guerras de poder y las guerras comerciales en curso, los bloques comerciales y militares emergentes, la asignación de grandes presupuestos militares, la fabricación de armas colosales y destrucción de masa, la modernización de las fuerzas militares y los varios tipos de preparativos para la guerra mundial, incluso en el espacio, demuestran la competición cuello a cuello por los recursos económicos y el control político sobre los países de Asia, África y América Latina, incluidos unos países de Europa del Este. Todo esto indica la intensificación de las contradicciones inter-imperialistas y la lucha por la re-división de los mercados y la hegemonía mundial.
El sistema imperialista mundial, decadente y descompuesto, en su inevitable marcha de no retorno hacia la sepultura, ha descargado sobre la sociedad las terribles consecuencias de la cada vez más aguda crisis económica mundial, y con ella, ha extendido y profundizado en todos los continentes las crisis social, sanitaria y ambiental. No basta para los insaciables imperialistas la monopolización y acumulación de capital a cuenta de la explotación mundial del trabajo social, de la usurera exportación del capital financiero, de la destrucción de la naturaleza, del saqueo de los países oprimidos. Las crisis de su sistema, principalmente la económica, impele a los imperialistas a realizar un nuevo reparto territorial del mundo ya repartido. Un nuevo reparto que solo puede hacerse por la fuerza económica, la fuerza financiera, la fuerza militar, la fuerza de la guerra mundial, entre unos países imperialistas que ruedan hacia la decadencia, y otros que lucha por la hegemonía mundial, como producto de la inexorable ley económica del desarrollo desigual de los países imperialistas.
Pero las mismas causas económicas y sociales que empujan a los imperialistas a las guerras de rapiña, se convierten en condiciones materiales invivibles, insoportables, para los esclavos del capital, condiciones materiales de la rebelión de los proletarios, pueblos, naciones y países explotados y oprimidos por los monopolios y países imperialistas. Y corresponde al Movimiento Comunista Internacional llevarles la conciencia revolucionaria, organizar y transformar las rebeliones en lucha revolucionaria contra el enemigo común: el sistema de la opresión y la explotación mundial capitalista.
El camarada Mao dijo: “Podría estallar una guerra mundial, y se producirían revoluciones, o podrían estallar revoluciones en todas partes y, al asignar su fuerza para resistirlas, sería imposible para el imperialismo librar una otra guerra mundial, pase lo que pase, es una era de revolución”.
Corresponde a los comunistas dar ejemplo de unidad y lucha internacionalista contra los preparativos de una nueva carnicería mundial imperialista; juntar y coordinar esfuerzos para promover la lucha revolucionaria de los ejércitos proletarios en todos los países contra la movilización de tropas y armamentos para las guerras reaccionarias; construir un frente común con todas las fuerzas revolucionarias, anti-imperialistas democráticas y ambientalistas que se oponen a la guerra y al apoyo militar de los regímenes lacayos a sus amos imperialistas en todo el mundo, especialmente en los países semi-coloniales y semi-feudales; rechazar y denunciar como traidores a los sátrapas oportunistas que a nombre de proletariado y de los pueblos, dan apoyo a alguno de los bandos imperialistas, pues todos son enemigos a muerte de los oprimidos y explotados del mundo; apoyar sin descanso la lucha revolucionaria dirigida por los auténticos comunistas marxistas-leninistas-maoístas, principalmente la guerra popular en la India, junto con las otras guerras populares en las Filipinas, Turquía, Perú, que hoy son la vanguardia de la Revolución Proletaria Mundial, contra el imperialismo y sus cancerberos nacionales reaccionarios.
¡El capitalismo imperialista está en crisis! ¡Viva el Socialismo y el Comunismo!
¡O la revolución detiene la guerra o la guerra desata la revolución!
¡Proletarios y pueblos del mundo, uníos contra el imperialismo!
Communist Worker Union (mlm) Colombia
Construction Committee of the Maoist Communist Party of Galicia
Maoist Communist Party – Italy
Communist(maoist) Party of Afghanistan
Communist Party of India (Maoist)
Communist Party of Nepal (Majority)
Red Road of Iran (maoist group)