Declaración de la LCI sobre la Guerra Popular en India

Como saben los camaradas, nuestros camaradas del Partido Comunista de India (Maoísta), el Ejército Guerrillero Popular de Liberación y las Organizaciones Revolucionarias de Masas y Comités Populares Revolucionarios dirigidos por el Partido, están implicados actualmente en el desarrollo de una contracampaña para derrotar la campaña de cerco y aniquilamiento llamada “Kagar”.

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¡Proletarios de todos los países, uníos!

¡La reacción está destinada a caer, la Guerra Popular en India está destinada a triunfar!

El ejército revolucionario se necesita porque los grandes problemas de la historia se pueden resolver únicamente por la fuerza, y la organización de la fuerza en la lucha de nuestros días es la organización militar.

– Lenin

La experiencia de la lucha de clases en la era del imperialismo nos demuestra que sólo mediante la fuerza del fusil, la clase obrera y el resto de las masas trabajadoras pueden derrotar a la burguesía y la clase terrateniente armadas; en este sentido cabe afirmar que sólo con el fusil se puede transformar el mundo entero.

– Mao Tsetung

Como saben los camaradas, nuestros camaradas del Partido Comunista de India (Maoísta), el Ejército Guerrillero Popular de Liberación y las Organizaciones Revolucionarias de Masas y Comités Populares Revolucionarios dirigidos por el Partido, están implicados actualmente en el desarrollo de una contracampaña para derrotar la campaña de cerco y aniquilamiento llamada “Kagar”. Esta heroica tarea está correctamente en el centro de atención de todo el Movimiento Comunista Internacional, y nadie puede ser indiferente ante ello. Como ya hemos dicho anteriormente: “Hoy, para los comunistas del mundo el Partido Comunista de India (Maoísta) representa tres grandes banderas rojas que separan el trigo de la cizaña en el Movimiento Comunista Internacional. 1. La defensa del Marxismo-Leninismo-Maoísmo frente al revisionismo. 2. El camino de la Guerra Popular frente al camino de los acuerdos de paz, la conciliación y la capitulación. 3. La bandera de la Revolución de Nueva Democracia, el campesinado como base de la lucha antiimperialista, contra los que niegan el carácter semifeudal de los países oprimidos por el imperialismo.(Celebremos y levantemos en alto el 20avo aniversario de la fundación del glorioso Partido Comunista de la India (Maoísta), LCI, septiembre de 2024)

Hoy nosotros, la Liga Comunista Internacional, reafirmamos esta posición y con ella como punto de partida, declaramos nuestra posición sobre la situación actual.

Cuando las masas se levantan, el colapso del viejo orden se acelera.

La última ola de levantamientos populares que tiene como punta de lanza a una nueva generación de jóvenes rebeldes en las Naciones Oprimidas, que inició en Indonesia y que ha agitado Nepal, Filipinas, Perú, Madagascar, Marruecos, y continúa desarrollándose incluso más, es una poderosa manifestación del Poder de las Masas; la Tierra se sacude cuando ellas se levantan, los cielos truenan y el Viejo Orden se desmorona. El creciente y cada vez más combativo movimiento antiimperialista en las Naciones Oprimidas, propulsado por el profundamente inspirador heroísmo del Pueblo de Palestina en su inquebrantable Resistencia Nacional contra el imperialismo estadounidense y los carniceros israelíes, muestra que el proletariado en las ciudadelas de los autoproclamados gobernantes del mundo se ha despertado de su letárgico sueño y demuestra con fuerzas renovadas que es merecedor de sus propias gloriosas tradiciones. En este periodo más reciente, las luchas del proletariado y de los pueblos de Ecuador (el paro en curso) y Francia (las luchas de septiembre), con la obvia diferencia entre ellos, destacan por ser movimientos con una importante influencia de los comunistas en áreas y sectores decisivos de las masas hondas y profundas y con un carácter mucho menos espontáneo. El mundo no está en paz, nunca lo estuvo, sino que está más y más agitado por las grandes luchas de las masas, quienes como heraldos de un nuevo amanecer confirman una vez más que la revolución es la tendencia principal. La situación revolucionaria en desarrollo desigual en el mundo se manifiesta poderosamente.

El sistema capitalista entero, en su etapa final y última, el imperialismo, está en crisis general que se acelera. El belicismo de los imperialistas, particularmente impulsado por los esfuerzos del imperialismo estadounidense para frenar su propio declive y su intento de recuperar posiciones perdidas, están generando un estímulo masivo en la militarización de los Estados imperialistas. Reacción en toda la línea, tendencia creciente hacia el fascismo y un deterioro masivo de las condiciones de trabajo y de vida de las Masas, no vistas de esta forma en décadas, son la realidad en todo el Planeta. En un mundo en el que existe el lujo más espantoso, 673 millones de personas están desnutridas y 2.600 millones de personas no pueden permitirse alimentos aptos para humanos.

La situación más crítica es la de las Naciones Oprimidas, donde la crisis del capitalismo burocrático se multiplica por las imposiciones de las instituciones del imperialismo y la agresión directa, como en el Caribe (Venezuela, Colombia, Haití, etc.), donde el imperialismo estadounidense viola abiertamente cualquier ley que haya existido al respecto de la soberanía de los Estados. La lucha entre los imperialistas por el control de los mercados y materias primas, “zonas de influencia”, colonias y semicolonias, es lo que conforma la contradicción entre los imperialistas, la contradicción interimperialista. Cuando la contradicción se agudiza, los imperialistas deben estrechar su control sobre “sus” colonias y semicolonias, para expulsar a sus competidores, imponer el orden de las bayonetas y la lealtad plena de sus lacayos, agudizando de esta forma la contradicción entre imperialismo y Pueblos y Naciones Oprimidas.

En la situación mundial actual, hay tres contradicciones fundamentales: la contradicción entre burguesía y proletariado, la contradicción entre los imperialistas (contradicción interimperialista) y la contradicción entre el imperialismo y los Pueblos y Naciones oprimidas. La contradicción principal es la que hay entre el imperialismo y los Pueblos y Naciones oprimidas. Esta contradicción juega un papel decisivo y dirigente, esto debe ser firmemente asido y entonces, como el Presidente Mao dijo, todos los otros problemas que debemos analizar serán “resueltos fácilmente”.

El creciente desarrollo del Movimiento de Liberación Nacional de los Pueblos y Naciones Oprimidas, destaca la necesidad de fusionarlo con el Movimiento Proletario Internacional. Esto implica, en otras palabras, que el Marxismo-Leninismo-Maoísmo y no ninguna otra ideología debe guiar la lucha en todo el mundo contra el imperialismo y la reacción, lo cual exige una lucha total contra el revisionismo y el oportunismo. Esta es la tarea de los Partidos Comunistas y exige que estos, estando en la primera línea de la lucha, con el fusil en la mano desarrollando la Guerra Popular, en medio de la confrontación sin piedad entre revolución y contrarrevolución, construyan un poderoso Frente Antiimperialista. Nosotros los maoístas sabemos muy bien que sin Ejército Popular el Pueblo no tiene nada.

Las vanguardias proletarias en armas en las Naciones Oprimidas, los Partidos Comunistas dirigiendo Guerras Populares, en esta situación juegan un papel crucial para el desarrollo de la lucha contra el imperialismo, para el desarrollo y futuro triunfo de la revolución proletaria mundial. Estos Partidos constituyen los destacamentos avanzados del creciente ejército de los oprimidos y explotados, los que muestran el camino al asaltar los cielos. Ellos son los vívidos ejemplos de la fusión del movimiento proletario con el movimiento de liberación nacional bajo la guía del Marxismo-Leninismo-Maoísmo. En este sentido la importancia de las Guerras Populares dirigidas por maoístas va más allá de su repercusión nacional, ya que son decisivas para la lucha por el triunfo del Comunismo en el mundo entero.

No sólo nosotros lo sabemos, sino que el enemigo es todavía más consciente de esto que muchos autoproclamados “comunistas revolucionarios”. Por ello los imperialistas y reaccionarios, particularmente el imperialismo estadounidense que aún cumple su papel como gendarme mundial de la contrarrevolución, realizan vastos esfuerzos para sofocar a sangre y fuego las Guerras Populares.

El revisionismo y el oportunismo, como siervos miserables de los explotadores que son, también juegan su papel, uno que es más peligroso que cualquier arma en el arsenal de la contrarrevolución. Estas criaturas e ideas asquerosas infiltran las filas del movimiento antiimperialista y revolucionario e intentan usurpar la dirección de los Partidos Comunistas con malvadas intrigas de todo tipo, y no dudan en colaborar en todos los sentidos con la policía política y grupos asesinos como la CIA y similares. En algunos casos tienen éxitos temporales, como en el caso de la traición Öcalan y el liquidacionismo del PKK contra las aspiraciones del pueblo kurdo por el derecho a la autodeterminación nacional, o en los casos en los que pudieron dividir al movimiento antiimperialista al poner a una parte del Frente de Resistencia Nacional en Palestina contra otra.

Es en este contexto histórico y político general de lucha entre revolución y contrarrevolución donde debemos ver la épica batalla que nuestros camaradas están librando en India actualmente.

La “Operación Kagaar” fracasará, el PCI (Maoísta) prevalecerá

La “Operación Kagaar” se desarrolla como una estricta aplicación de la siniestra estrategia del llamado “Conflicto de Baja Intensidad” (LIC), desarrollada por el imperialismo estadounidense. Es particularmente evidente que las lecciones aprendidas por los imperialistas estadounidenses en la lucha contra la Guerra Popular en Perú están siendo aplicadas en la “Operación Kagaar”. Esto es una confesión en la práctica de cómo de peligrosa consideran los imperialistas y las reaccionarios la Guerra Popular en India. La campaña furiosa y sangrienta del enemigo es una expresión de su miedo por la fuerza del movimiento revolucionario.

La fuerte centralización en las manos del Gobierno Central y la unificación las Estructuras de Mando de la Policía, Servicios Secretos y Ejército, combinadas en un ataque total contra cualquier forma de oposición por parte de los intelectuales, progresistas o incluso Partidos parlamentarios (¡incluso el Partido Congreso Indio ha sido acusado de colaborar con los “Naxalitas Urbanos!), aseguran que el todo poder del Viejo Estado burocrático-terrateniente pueda ser dirigido contra el movimiento revolucionario. La dirección de la campaña militar de forma directa por parte del Ejército, el uso de bombardeos aéreos, de “fuerzas especiales” dirigiendo el contingente principal de fuerzas paramilitares y policiales. La persecución draconiana, con tortura, violación y secuestro/”desaparición”, contra organizaciones democráticas que habían operado previamente de forma relativamente libre, para silenciar las correas de transmisión del Partido y generar un clima social dominado por el terror blanco. El uso de un sistema de “aldeas seguras” (en la práctica, Campos de Concentración) y “Bases Operacionales Avanzadas”, con bases militares en el centro de un “sistema de seguridad de control de alfombra”. El uso de “Programas de Acción Civil”, “políticas amigables”, intentando “comprar” a las masas al aprovecharse de su pobreza mediante el reparto de bienes. Los esfuerzos para hacer una campaña de desinformación, como parte de la guerra psicológica, para alcanzar hasta la aldea más remota (el CRPF repartiendo decenas de miles de radios en Bastar). La política de movilización de pistoleros de los terratenientes, renegados y masas obligadas a formar parte de las milicias contrarrevolucionarias (como la “Guardia de Reserva de Distrito”), para hacer que las Masas luchen contra las Masas. Programas masivos para traidores y renegados, con amnistía y “compensación” económica para aquellos que “se arrepienten” y “se sumen a la corriente”. Una cobertura mediática centralizada, donde las pérdidas de las Fuerzas del Viejo Estado son ocultadas, pero sus “éxitos” son exagerados, con una intensa cobertura de cuadros renegados e imágenes de “rendiciones en masa” (no pocas veces escenificadas).

Todo esto que está pasando en India es muy similar a lo que el imperialismo estadounidense aplicó en Perú a inicios de los años 90. Como los camaradas indios han declarado: “Los programas de contrainsurgencia en India está directamente guiados por las fuerzas imperialistas, especialmente los imperialistas estadounidenses. En la formación del Centro Nacional Antiterrorista (NCTC) y en la actual Operación Kagaar, el papel de los imperialistas estadounidenses es fundamental.

Los imperialistas estadounidenses y sus “socios” indios siguen un plan a largo plazo. No improvisan. Han estudiado al PCI (Maoísta) durante un largo tiempo y saben que al Partido Comunista solo se le pueden asestar golpes severos cuando se les ha infiltrado o/y conseguido colaboradores entre sus filas. Es parte de la estrategia de LIC para intentar dividir la fuerza insurgente y por esto la fuerza reaccionaria intenta intervenir activamente en su vida interna. Líderes particularmente importantes son asesinados o detenidos y se deja con vida a conocidos derechistas. El Secretario General, el Camarada Basavaraj, dio su vida por la continuación de la Guerra Popular hasta la victoria. Su resistencia heroica hasta su último aliento contra el ataque del enemigo, junto con más de 20 cuadros dirigentes que rechazaron rendirse, fue un poderoso ejemplo dado por un comunista consciente de su papel de dirección del Partido y de su guía para la Guerra Popular, mientras “Sonu”, quien predica la capitulación, aún está vivo; no hay coincidencias en la Política. Así como los revolucionarios intentan explotar al máximo las contradicciones en el campo enemigo, también lo hacen los reaccionarios.

El Presidente Mao Tsetung nos enseña que los factores internos son siempre determinantes y que en aquellos momentos de mayor agudización de la lucha entre revolución y contrarrevolución, cuando se enfrentan importantes dificultades y golpes, la tendencia hacia la capitulación aparece. En un inicio emerge como ideas y concepciones, y pronto puede evolucionar hacia una línea revisionista, y traición y colaboración con la reacción. El Comité Central del PCI (Maoísta) denuncia y rechaza la banda de Sonu que ha traicionado al Partido y la revolución. El renegado Sonu fue representante de la tendencia hacia la conciliación, capitulación y pensamiento unilateral y miedo a la muerte, chocando con los principios del Partido y del Marxismo-Leninismo-Maoísmo. Recurriendo a viejos y desgastados argumentos, acusa al PCI (Maoísta) de ultraizquierdista, de “rechazar la lucha legal”, para ir contra del principio de la omnipotencia de la guerra revolucionaria, de la guerra popular prolongada, y al final contra la línea militar del PCI (Maoísta). Como el PCI (Maoísta) ha denunciado, en la base política del revisionismo de Sonu, estaba la negación del carácter semifeudal de la sociedad india, y que la contradicción principal ha cambiado hacia la contradicción entre proletariado y burguesía, intentando liquidar la Revolución de Nueva Democracia y la Guerra Popular.

Sonu y su banda se opusieron a la lucha de dos líneas, al centralismo democrático del Partido, para dirigir una conspiración tratando de dividir al Partido. Fue evidente que tales posiciones y argumentos contra los principios del Partido fueron una excusa para intentar liquidar el Partido, para capitular de la Guerra Popular y pronto sumarse a las filas de la contrarrevolución y comenzar a entregar las preciosas armas del Partido a la Contrarrevolución.

El Comité Central del Partido Comunista de India (Maoísta) apunta:

Las tendencias conciliadoras que Sonu y Satish alimentaron durante décadas se transformaron gradualmente en conciliación, con la Operación Kagaar este oportunismo conciliador se transformó en traición y en acción contrarrevolucionaria. No supimos evaluar correctamente este proceso a tiempo. Como resultado de este fracaso, ambos utilizaron sus posiciones de dirección para infligir un grave daño al movimiento revolucionario. Informamos al campo revolucionario que revisaremos este fracaso y extraeremos las lecciones necesarias. (…)

Incluso si Sonu y Satish se rindieron hoy y otros se rinden mañana, prometemos al pueblo que nuestro Partido nunca se rendirá al enemigo. Mientras haya clases, la lucha de clases, en su forma más elevada, la Guerra Popular, continuará; esta es una ley histórica. Los que se rinden Las rendiciones no pueden cambiar esta ley. Por lo tanto, incluso con retrocesos temporales, debemos avanzar con gran confianza y coraje en la lucha por el progreso del movimiento revolucionario. La victoria final será del pueblo.”

La experiencia histórica nos ensena que el enemigo recurre a elementos revisionistas, oportunistas y traicioneros para intentar dividir al Partido. Este es un elemento fundamental de la estrategia de LIC: el enemigo hace todo lo que puede para generar confusión, para que las fuerzas revolucionarias empiecen a dudar, porque quien duda pierde la iniciativa. Sin iniciativa el Ejército Popular no puede aplicar defensa activa, se convierte en relativamente pasivo y puede ser aniquilado.

Hay dos formas de derrotar al Ejército Popular, separarlo de las Masas o decapitarlo liquidando su dirección; en esencia esto es: la fuerza reaccionaria necesita destruir la dirección del Partido Comunista para causar una derrota temporal de la Guerra Popular, porque es la correcta dirección Marxista-Leninista-Maoísta la que garantiza la unidad entre el Ejército Revolucionario y las masas.

Los comunistas en todo el mundo deben aplastar poderosamente estos ataques del enemigo y cerrar filas con el Partido Comunista de India (Maoísta), dirigido por el Comité Central elegido por el Congreso del Partido y quien aplica la línea partidaria como se ha establecido en él. Cualquiera que no se sujete a los documentos fundamentales del Partido y a su disciplina, no tiene derecho a defender ser miembro del Partido. Así es como un Partido Comunista funciona, es una cuestión de principio y cualquiera quien tenga el conocimiento más elemental de Marxismo-Leninismo-Maoísmo, sabe esto.

La línea básica del Partido Comunista de India (Maoísta), el camino a seguir para la Revolución India, la Guerra Popular Prolongada, para Conquistar el Poder en todo el país y culminar la Revolución de Nueva Democracia y tras esto, avanzar en la Revolución Socialista y marchar hacia el Comunismo, como se establece por parte del Congreso del Partido y los Documentos Básicos, es correcta sin lugar a dudas. Esta es la única línea Marxista-Leninista-Maoísta, y cualquier otra línea es traición revisionista. Lo que sea que el Comité Central del Partido haya concluido después de que los camaradas hayan resumido las experiencias del periodo actual, cuales sean los posibles ajustes que asuman al respecto de las cuestiones sobre la táctica y aplicación, nada cambiará esto.

Cualquier retroceso temporal, una pérdida de una Base de Apoyo, el restablecimiento del Poder del Viejo Estado en algunas áreas donde los Comités Populares Revolucionarios existieron, no es nada extraño para los maoístas. Las Bases de Apoyo son fluidas en esencia, como expresión de la forma en la que la Guerra Popular se desarrolla, mediante un proceso en el que dos lados en lucha, revolución y contrarrevolución, intentan cercarse y aniquilarse el uno al otro hasta la victoria final de la revolución. La Guerra Popular en China se desarrolló de esa forma, y así lo ha hecho toda Guerra Popular que se ha luchado hasta el día de hoy. Bajo la dirección absoluta del Partido, el EGLP movilizará, politizará, organizará y armará a las Masas, y el Nuevo Poder florecerá de nuevo, reconquistando zonas perdidas y conquistando otras nuevas.

La Liga Comunista Internacional se mantiene firmemente, hombro con hombro, con el PCI (Maoísta), el Ejército Guerrillero de Liberación Popular, las Masas del Frente Revolucionario en el campo y en las ciudades, bajo la bandera del Marxismo-Leninismo-Maoísmo, la bandera de la Guerra Popular, y rechaza y condena cualquier intento de sembrar la confusión, el pesimismo y la capitulación. Estamos plenamente convencidos que nuestros camaradas en India, dirigidos por el Comité Central, derrotarán la estrategia de LIC, desarrollando más la Guerra Popular. Nada puede derrotar el Poder de las Masas organizadas, y bajo la dirección de la vanguardia proletaria de la revolución india, el glorioso PCI (Maoísta), el Pueblo de India continuarán barriendo el Imperialismo, Capitalismo Burocrático y la Semifeudalidad con la Guerra Popular, y culminará victoriosamente la Revolución de Nueva Democracia conquistando el Poder en todo el país y así construirá el Socialismo y, con Revoluciones Culturales, marchará hacia el Comunismo junto con el resto de la Humanidad. Esto es el cumplimiento de las Leyes de la Historia, es una expresión de la misma Ley del movimiento de la Materia, los traidores pueden decir lo que quieran, pero esto es un Hecho.

El Revisionismo es el principal peligro en el Movimiento Comunista Internacional

Las posiciones revisionistas del renegado Sonu y su banda y su traición no son un fenómeno exclusivo de India; también son una expresión de posiciones revisionistas existentes en el MCI, donde hay hay defensores tanto abiertos como ocultos del Renegado Sonu. Por esta razón, debemos asumir la lección de los acontecimientos y tomar lo que sucedió con la banda de traidores de Sonu como una advertencia importante para el MCI y un llamado a elevar la lucha contra el revisionismo y todo oportunismo, y particularmente contra las tendencias capitulacionistas y traidoras. Cerrar filas con el PCI (Maoísta) es combatir a los seguidores de Sonu en el MCI, barriendo así todas las posiciones revisionistas y oportunistas que convergen con sus posiciones.

Aquellos que propagan la negación del carácter de los Países Oprimidos como países semicoloniales y semifeudales en los que el capitalismo burocrático se desarrolla, usando viejos lemas trotskistas sobre “países capitalistas dependientes” o la teoría kautskiana de “nuevos países imperialistas”, siempre alimentados como perros hambrientos por sus amos imperialistas con “nuevos datos económicos” que oscurecen, para los aspirantes a “intelectuales” pequeñoburgueses sin fuertes lazos con las Masas, las relaciones de explotación y las relaciones económicas del imperialismo, son verdaderos agentes de la burguesía. La fuerza principal de la revolución proletaria mundial, en su fase actual de desarrollo, es la revolución de Nueva Democracia dirigida por el proletariado mediante sus Partidos Comunistas, y esto es precisamente lo que el revisionismo quiere que perdamos de vista, como siempre, invocando “nuevas condiciones” y lanzando acusaciones de “ultraizquierdismo”.

En el mundo actual, vivimos en momentos de aceleración histórica en los que los comunistas de todo el mundo son llamados a implicarse en grandes batallas para ponerse al frente de los eventos y desarrollar las fuerzas subjetivas de la revolución. El Presidente Mao nos enseñó que el miedo es contrario a la revolución, y que sólo aquellos que no tienen miedo de ser cortados en mil pedazos desmontan al emperador. Sonu, su miedo a la muerte y análisis unilateral, representan el espíritu capitulacionista opuesto a la revolución. Por ello hacemos un llamamiento a todo el MCI a aprender de estas lecciones que el PCI (Maoísta) nos está mostrando, de nuevo, que el revisionismo es el principal peligro en el Movimiento Comunista Internacional y que debemos endurecer la lucha de dos líneas para combatirlo en nuestras filas y promover la necesidad de entregarse de forma totalmente desinteresada a la revolución.

Es momento de cerrar filas más firmemente que nunca con el PCI (Maoísta)

Es necesario fortalecer y elevar a nuevas cotas el apoyo del movimiento antiimperialista y revolucionario internacional a la Guerra Popular en India. Debemos ser coadyuvantes en la derrota de la “Operación Kagar”.

Durante las últimas dos décadas el PCI (Maoísta) ha sido una fuente de la más fuerte inspiración para los comunistas y revolucionarios en todo el mundo. De hecho, muchas de los revolucionarios proletarios de las nuevas generaciones que están jugando un papel decisivo ahora en la lucha por reconstruir el movimiento revolucionario y antiimperialista en muchos países, y están realizando valiosas contribuciones a la lucha por la reconstitución de los Partidos Comunistas, fueron ganados por la vanguardia maoísta debido al poder de la impresión de la transformación revolucionaria de la realidad mediante la Guerra Popular dirigida por el PCI (Maoísta), un proceso similar al cual en el que el Presidente Mao dijo que la salva de los cañones de la Revolución de Octubre trajo el Marxismo-Leninismo a China. Incluso teniendo en cuenta sólo este hecho, sería suficiente para demostrar la importancia de la revolución de nueva democracia desarrollándose en India para la revolución mundial. Pero por supuesto, la importancia del desarrollo de la revolución en el país más poblado del mundo es mucho más grande que eso. El peso de las Masas decide el desenlace final de la guerra para derrotar al imperialismo, nuestro progreso o retroceso en India por tanto es decisivo para la relación de fuerzas entre revolución y contrarrevolución en todo el mundo. Como internacionalistas proletarios tenemos el solemne deber de mantenernos sólidos como la roca al lado de nuestros camaradas en India, debemos continuar haciéndolo con la firme convicción de que lo que está en juego es el ritmo de desarrollo de la revolución mundial.

Debemos redoblar nuestros esfuerzos para desarrollar la campaña internacional de apoyo a la Guerra Popular en India. Para triunfar no debemos permitir que el maligno plan del imperialismo, como parte de su estrategia de LIC, y los indios reaccionarios, con la ayuda de renegados y traidores, siembre confusión y pesimismo. Debemos desenmascarar la guerra psicológica del enemigo elevando la conciencia de nuestras propias fuerzas y de las Masas en general con la verdad del Marxismo-Leninismo-Maoísmo, desarrollando nuestra contraofensiva ideológica y política. Debemos lanzarnos a la batalla en todos los frentes para rechazar cualquier ataque contra nuestros camaradas de India. Debemos atacar por la espalda a los imperialistas y hacer todo lo que podamos para sabotear sus planes. Debemos unirnos todos los que puedan estar unidos para derrotar la “Operación Kagar” y la estrategia de LIC en general, por la victoria de la Revolución de Nueva Democracia en India a través de su único camino, la Guerra Popular.

Llamamos a los Partidos Comunistas y organizaciones revolucionarias, a los antiimperialistas del mundo y todo aquel quien esté contra la reacción, a avanzar rápidamente en la construcción del Frente Antiimperialista, luchando para canalizar los crecientes sentimientos antiimperialistas y la protesta de las Masas en una corriente poderosa de acción beligerante, con la Guerra Popular en el centro. Este proceso ahora debe dar un salto, lo que hemos hecho hasta ahora no es suficiente. Los marxistas-leninistas-maoístas en cada país deben hacer todos los esfuerzos necesarios y ajustes para desarrollar su actividad en ese sentido. Nosotros, la Liga Comunista Internacional, cumpliremos nuestro papel con cada vez más firmeza y determinación.

Camaradas,

Invitamos a todos los partidos y organizaciones comunistas a unirse a este llamamiento, manifestando su adhesión y firmándolo, buscando impulsar una campaña unificada del MCI en defensa del PCI (Maoísta) y la Guerra Popular en India.

¡Viva el Partido Comunista de India (Maoísta)!

¡Honrar a los héroes caídos siguiendo el camino de la Guerra Popular!

¡Abajo la “Operación Kagar”!

¡Viva la Guerra Popular en India!

¡Viva el Marxismo-Leninismo-Maoísmo!

Liga Comunista Internacional

Firmantes no miembros de la LCI:

Acción Antiimperialista (Portugal)

Nueva Hegemonía (Italia)

Comité de Maoístas de la Federación Rusa

Comité Estrella Roja (Dinamarca)

Comité Comunista de los Países Bajos

Octubre de 2025