¡En defensa de la vida del Presidente Gonzalo enarbolar más alto la bandera del Maoísmo!

¡Proletarios de todos los países, uníos!

¡En defensa de la vida del Presidente Gonzalo enarbolar más alto la bandera del Maoísmo!

Finalmente ahora escuchemos esto, como vemos en el mundo, el maoísmo marcha inconteniblemente a comandar la nueva ola de la revolución proletaria mundial ¡entiéndase bien y compréndase! los que tienen oídos, úsenlos, los que tienen entendimiento y todos los tenemos manéjenlos ¡basta de necedades basta de oscuridades! ¡entendamos eso! ¿qué se desenvuelve en el mundo? ¿qué necesitamos? necesitamos que el maoísmo sea encarnado y lo está haciendo y que pase generando Partidos Comunistas, a manejar, a dirigir, esa nueva gran ola de la revolución proletaria mundial que se nos viene. (Discurso Presidente Gonzalo, set.1992)

Los Partidos y Organizaciones marxistas-leninstas-maoístas firmantes nos reafirmamos, en esta solemne celebración de los 26 años del histórico y transcendental discurso del Presidente Gonzalo, en su plena vigencia y muy especialmente en defender la vida de ese titán del pensamiento y la acción, Jefe del Partido Comunista del Perú y de la revolución peruana; quien ha definido el maoísmo, como nueva, tercera y superior etapa del marxismo y quien estableció, que ser marxista hoy es ser marxista-leninista-maoísta, principalmente maoísta. Entendemos que la defensa del Presidente Gonzalo, implica luchar de la forma más consecuente por poner el maoísmo como único mando y guía de la nueva gran ola de la revolución proletaria mundial, que ya se está desarrollando. Entendemos que esa lucha es parte de la tarea para reunificar a los comunistas del mundo, que implica poner en primer lugar los principios del marxismo, los intereses de clase del proletariado internacional, la lucha de liberación de los pueblos y naciones oprimidos, en fin la lucha por el Comunismo.  

La campaña de celebración del 200° aniversario del natalicio del Gran Carlos Marx – a la cual procedió las celebraciones del 50° aniversario de la Gran Revolución Cultural Proletaria y del 100° aniversario de la Revolución de Octubre – ha marcado un salto en la lucha por unir a las comunistas en el mundo. Es una campaña, impulsada principalmente por los Partidos y Organizaciones Marxista-Leninista-Maoístas de América Latina, viene demostrando una más elevada unidad ideológica, política y organizativa de parte significativa del Movimiento Comunista Internacional (MCI) y, en su desenvolvimiento va aunando fuerzas nuevas.  Desde la campaña de celebración del 100° aniversario del natalicio del Presidente Mao Tsetung,  no ha habido una campaña similar en el MCI. Para que nadie se confunda: las campañas de apoyo a las guerras populares, obviamente, no han sido del mismo carácter, esta es un campaña de Partidos y Organizaciones con explicito carácter comunista – este hecho llama a una seria reflexión, porque es expresión, de cómo en la práctica, la lucha por la unidad se desenvuelve poniendo como punto de partida el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, la lucha contra el revisionismo y el servir a la revolución mundial, en resumen, como se va plasmando la consigna ¡Unirse bajo el maoísmo!

También es importante resaltar, para todos los que quieren ver, que en los últimos años se ha dado un impulso importante en el MCI. En varios países donde las fuerzas comunistas estaban en un estado muy poco desarrollado, han resurgido Partidos y Organizaciones que enarbolan el marxismo-leninismo-maoísmo y bregan por reconstituir sus partidos comunistas destruídos por el revisionismo. La mayoría de estas fuerzas toman una clara posición por la definición del maoísmo hecha por el Presidente Gonzalo. Eso lleva a que algunos, ajenos de todo criterio marxista, los calificen como “gonzalistas” e imputen a la izquierda de “sectarios y dogmáticos”. Aparte de lo obvio – que el oportunismo y el revisionismo siempre han tildado a los marxistas así –  revela que no han entendido que estamos en el período de lucha por imponer  el maoísmo como único mando y guía de la revolución proletaria mundial y que al asumir el maoísmo como tercera etapa del desarrollo de la ideología del proletariado internacional, muchos partidos y organizaciones, en esencia, lo vieron solamente como cambiar una formulación, que hablar de maoísmo era un forma “más moderna” de hablar sobre el pensamiento Mao Tsetung.

Entonces, el problema en el MCI no radica, principalmente, en que el maoísmo no esté reconocido formalmente, sino en cómo lo entienden algunos, por eso la importancia de partir de quien definió el maoísmo como la nueva, tercera y superior etapa de nuestra ideología; porque solo partiendo de lo establecido cientificamente por el Presidente Gonzalo es que podemos entender el maoísmo como una unidad, como un sistema armónico. Sí no se parte de lo establecido por el Presidente Gonzalo se cae en eclecticismo, contraponiendo citas, pero no entendiendo las ideás. Si entendemos esto, podemos entender la razón por la cual, no son pocos los Partidos y organizaciones que llevando tiempo más prolongado se han quedado estancados y no dan saltos en su procesos, mientras los que más se afincan en aprender del Presidente Gonzalo, en general, van avanzando, principalmente en términos cualitativos, pero también en términos cuantitativos.  Los que se apuran de poner etiquetas les aconsejamos que abran sus ojos al verdad material en vez de dejarse exaltar por su imaginaciones.

Si vemos el estado real de la lucha por la reunificación de los comunistas en el mundo podemos constatar que en muchos aspectos estamos mucho mejor que lo que estuvimos en los mejores momentos del Movimiento Revolucionario Internacionalista (MRI), que si bien el MRI correctamente fue caracterizado por el Presidente Gonzalo como un “paso adelante”, él también señaló, con la precisión que le es propia, que “mientra se siga una linea ideológica-política justa y correcta”; será un paso adelante, y así el MRI sirvió a unir a los comunistas en base a la linea roja, y ésta no podía ser otra que la del Presidente Gonzalo. Es decir, lo principal de la evaluación del MRI es constatar que, sirvió a la revolución proletaria mundial – y en particular a la tarea de bregar por la reunificación de los comunistas, mientras sirvió a la lucha de poner el maoísmo como su único mando y guía; es decir, a  la lucha dirigida por el Presidente Gonzalo, y dejó de jugar un papel positivo, cuando los revisionistas del “PCR” de los Estados Unidos, aprovechando la situación problemática de la izquierda por el recodo en la guerra popular en el Perú, pasó a hegemonizarlo totalmente. Nunca debemos olvidar que la unidad es para servir a la revolución y solamente se la sirve cuando el interés del proletariado se impone. La unidad de los comunistas, hoy en el mundo,  solamente se puede dar en base al marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, de lo contrario no es unidad de comunistas, sino un especie de “frente” con el revisionismo y el oportunismo.               

El MRI fue liquidado por el manejo que hizo de la lucha de dos lineas el revisionismo. La maniobra de Avakian fue plantear como punto de partida su “critica” a la segunda línea oportunista de derecha, revisionista y capitulacionista en Perú, que, supuestamente, “no importa el autor sino la linea”, lo cual precisamente llevó a centrar el debate en torno quien era “el autor”. ¿O este miserable no sabía que los comunistas del mundo iban a saltar cuando se ponía en cuestión a la Jefatura? Así se desenrrumbó la lucha de dos lineas. El problema para la izquierda en el MCI, fue la situación difícil y compleja en la cual entró el PCP después de la detención del Presidente Gonzalo.

 Pese a todo, el PCP siguió cumpliendo su papel como la Fracción Roja del MCI y la guerra popular sigue siendo faro y guía de la RPM. Porque la vida del partido no puede ser cesada jamás y la guerra popular no se ha detenido ni un sólo instante. Pero, situaciones como la falta del Jefe causan problemas en la izquierda.   La derecha pudo así ir planteando sus posiciones (los ataques contra la dictadura del proletariado, la “justeza de las negaciones de paz como táctica”, la negación de la semifeudalidad y la evolución del capitalismo burocrático, la negación del las tres características del imperialismo, etc.) y todo eso pasó a segundo plano porque la atención se centró en “debatir” las maniobras de la guerra psicológica del imperialismo y la actuación siniestra de traidores. Alrededor del cambio de siglo la lucha se agudizó.  Así, la izquierda entró en problemas y, en gran parte, cayó en la trampa de Avakian, la iniciativa quedó en manos de la derecha y esta podía llevar la lucha de dos lineas a explotar y así el revisionismo liquidó el MRI.

Nadie puede culpar a los marxistas por los crímenes del revisionismo, pero sí es necesario este balance autocrítico de la izquierda, a cuya dirección le faltó la madurez y previsión necesarias para conjurar las intrigas del revisionismo, problema que se agravó al extremo por la infiltración y usurpación de aparatos enteros por parte de los servicios secretos y policiales de la reacción.   
 
Prachanda, por su parte, ya renegó hasta formalmente del marxismo-leninismo-maoísmo uniéndose con los revisionistas del UML, comprobando una vez más que nunca fue maoísta, que nunca fue el “gran dirigente” que tanto reclamaron quienes queríen negar lo planteado por el Presidente Gonzalo y el PCP, desnudándose ante el mundo como él más miserable arribista, traficante e intrigante que se ha presentado en los últimos décadas en el MCI – ya no se puede calificar este miserable como traidor porque ha demostrado que en toda su vida nunca fue comunista, sino lo único que le ha interesado ha sido su poder personal y por esto no tienen ningún miramiento en llamar “camaradas” a los verdugos de la revolución nepalí como son las ratas de UML.

Ya han pasado años desde que el galán Avakian se catapultó a sí mismo fuera de las filas del MCI.  Su “nueva síntesis” es una ruptura con el marxismo, es un deslinde absoluto con la ideología del proletariado internacional, es una negación abierta y descarada del marxismo-leninismo-maoísmo. Avakian, como Alejandro, se proclamó dios, la diferencia es que el segundo lo hacía para mantener su imperio y para controlar sus nuevas fuerzas, mientras el primero lo hizo para mantener su pequeña corte degenerada y poder seguir vegetando en el lodo.

Si bien, las posiciones revisionistas de ambos, principalmente de Avakian por haber sido la cabeza de la derecha, siguen repercutiendo, y la lucha contra aquellas por lo tanto no puede ser declarada por terminada, está el hecho que ambos huyeron de la lucha interna en el MCI y por eso tampoco pueden ser tomados como el centro en la lucha de dos lineas. Plantear que el centro de la lucha es criticar a estos dos miserables es plantear la conciliación con el revisionismo y es dar campo libre a la derecha.

El problema principal no está en los que se han quedado fuera, los renegados, sino en los que forman parte del MCI. Sí hay que desmontar y aplastar su nefasta linea, pero eso para unirnos más sobre el base del marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, con los aportes de validez universal del presidente gonzalo y eso implica debatir los puntos centrales y, en particular, lograr una compresión generalizada del maoísmo como unidad.  
    
Hay quienes hasta ahora insisten en divulgar la patraña contrarrevolucionaria (que el Presidente Gonzalo sería la cabeza de la linea oportunista de derecha revisionista y capitulacionista). Argumentan con lo planteado por los traidores (“él me dijo” o “él me abrazó” y otros chismes) y con el manejo del imperialismo y la reacción de la guerra psicológica (“juicios” y videos “filtrados”). Supuestamente habría que tomar muy en serio cualquier cosa que venga de quien sea que quiere tirar lodo al Presidente Gonzalo, “analizar” y rompernos la cabeza para entrar en una discusión “si es él o no es él”. Están mal, porque no entienden que “el debate” ya se cerró, las comunistas ya tomaron posición y la cuestión esta definida: ha quedado demostrado que en ningún momento el Presidente Gonzalo ha negado la Base de Unidad Partidaria del PCP, es el jefe del Partido y la revolución, el más grande marxista-leninista-maoísta viviente sobre la faz de la tierra, sigue luchando transformando el campo de concentración de la Base Naval de Callao en la más alta luminosa trinchera de la guerra popular. Lo que corresponde es defender su vida con guerra popular. Son ya 26 años en los cuales el Presidente Gonzalo no ha podido comunicarse directamente con el Partido o el MCI, son 26 años de aislamiento absoluto, eso es lo concreto. Que el imperialismo, la reacción y el revisionismo van a seguir urdiendo intrigas está claro, lo otro sería que cambiarán su naturaleza (tesis de los seguidores del sagrado Avakian, que es un imposible), pero no podemos permitir que esas intrigas detengan el avance de los comunistas.

Qué quede claro: que los comunistas nos reafirmamos en el principio de la critica y autocrítica y la seriedad de un Partido, como nos enseño Lenin, se mide por su capacidad de asumir la autocrítica. Por eso no cerramos la puerta a nadie, aparte de los que han manchado sus manos con el sangre de la masas. Así, si los que han cometido faltas y errores graves quieren realmente corregirse son muy bienvenidos; para eso tienen que demostrar su condición de comunistas y cerrar filas con la izquierda, que entiendan que para ser jefe hay que mover a más que sus “cercanos y queridos”, que un jefe proletario no es un ridículo mandamás sino quien sabe dirigir la transformación del mundo.         

En ocasión de celebrar un nuevo aniversario del Discurso del Presidente Gonzalo, nos toca muy particularmente saludar a los camaradas del Partido Comunista del Perú, quienes con firmes pasos avanzan en la reorganización general del Partido y ya ven cercano el día su culminación; proceso que se da en medio de la guerra popular, como prueba, una vez más, las recientes acciones contundentes del Ejercito Popular de Liberación, manteniendo los Comités Populares y Bases de Apoyo. Los comunistas del mundo reconocemos el papel extraordinario del PCP y nadie puede dudar que la culminación de la reorganización de este Partido significara un impulso clave para la revolución proletaria mundial y será un pieza decisiva en la lucha por la reunificación del MCI.    

Debemos entender que se cumple los que dijo el Presidente Gonzalo el 24 de septiembre 1992, el maoísmo esta encárnandose en los pueblos del mundo, esta generando Partidos Comunistas marxistas-leninistas-maoístas, pasa a dirigir la nueva gran ola de la revolución proletaria mundial. Lo que toca es luchar para que se encarne más, que avancen las guerras populares en marcha, que la guerra popular sea iniciada lo más pronto posible en cada país donde existen Partidos Comunistas, que se impulse aún más la lucha por la reconstitución de los Partidos en los países donde no los hay, para que sean partidos que inicien guerra popular. Entendiendo el maoísmo como unidad, marcharemos con cada vez más claridad y firmeza hacía la reunificación de los comunistas a nivel mundial, aplastando al imperialismo, la reacción y el revisionismo, aprendiendo del Presidente Gonzalo.    

¡Viva el Presidente Gonzalo!
¡Unirse bajo el Maoísmo!
¡La Guerra Popular vencerá inevitablemente!

Firmas:

Partido Comunista de Ecuador – Sol Rojo

Partido Comunista del Brasil (Fracción Roja)

Movimiento Popular Perú (Comité de Reorganización)

Fracción Roja del Partido Comunista de Chile

Organización Maoísta para la Reconstitución del Partido Comunista de Colombia

Núcleo Revolucionario para la Reconstitución del Partido Comunista de México

Comité Bandera Roja – Alemania

Comités para la Fundación del Partido Comunista (Maoísta), Austria

EE.UU. Guardias Rojos

Servir al Pueblo – Liga Comunista de Noruega

Colectivo Bandera Roja (Finlandia)